Ya sabés como es... Un día cualquiera te cruzás a este chico, lo ves a los ojos (te gustan), examinás su sonrisa (te parece dulce), observás toda su cara, su pelo, su forma de vestir... Automáticamente te enamorás. Cuando salen actúan como tontos, como niños, y eso les parece divertido. Porque la otra persona te parece divertida. Se aman. Él te lo dice, y vos le contestás un "yo también". (Enserio, ¿no se te ocurrió decir algo mejor que eso?). Pasados esos días en los que todo era risas y juegos terminás aburriéndote. ¿Por qué? Rutina. Rutina y seriedad. Esos juegos divertidos están ya desgastados como esos jeans que tanto amabas usar. Así es como resulta ser al final, lo usaste como a una prenda de ropa hasta desgastarse. Y todo fue para darle sentido a esos infinitos días aburridos.
Ya sabés como es... Él queda perdidamente enamorado y solo, esperanzado con enamorarte otra vez. Pero él no sabe que nunca sentiste amor, solo fueron unos ojos, una sonrisa y un cuerpo imitándote.
¿Amor? ¿Qué es eso? ¿Se come?