Antes de conocerlo no tenía idea de lo que era el amor. Jamás lo había sentido por nadie. Pero cuando lo vi por primera vez me pasó algo muy extraño. Fue como si mi corazón se detuviera en ese preciso instante y volviera a bombear como si nada. Me pregunté quien era este chico que era capaz de provocarme tal cosa. Desde entonces lo intenté todo para acercarme a él, pero es que es tan difícil... No imaginaba cuanto. Comúnmente no me preocuparía porque un solo chico no me mirara. Total hay un montón más en la pecera. Pero este chico no es como todos ellos. Tiene algo especial. Algo por lo cual me pongo nerviosa y me aterro al pensar que no le atraigo. La anterior noche estuvo todo el tiempo con esa chica rubia que se hace llamar su mejor amiga. Ja. Él puede que se trague ese cuento pero no yo. Esa chica ni siquiera se percataba en disimular. Era más clara que el agua. ¿Él lo sabrá? Si no lo sabe, o si no se dio cuenta, es un idiota. Sin embargo, tal vez lo sabía y solo la quería como a su amiga. Eso sería mejor. Pero ¿por qué no me prestó atención en toda la noche? Ningún otro chico cometería el error de dejarme tirada. Y él lo había echo. ¡Dios como lo odiaba! Aunque también me encantaba. Mucho. Tal vez por eso me atraía tanto. Porque no era un blanco fácil. Y así como me encanta también me mata con su indiferencia. ¿Tanto le molesta mirarme? Si tan solo se fijara en mí en lo que son tres segundos se daría cuenta de lo que me pasa con él. De todos modos, parece que le gusta pasar tiempo con su amiguita. No lo entiendo. Enserio que no lo entiendo. ¡Y me desespero! ¡Si quiera me mira! ¿Qué se cree? ¿Qué puede jugar así como así con los sentimientos de los demás? Estaba muy equivocado. El error más grande que pudo haber echo es pasar de mí. ¿Y si se trataba de otra? Podría ser. ¡Lo que muero por saber quien es! Así podría tener una idea de con quien me enfrento. Ja. Ni esa chica X ni ninguna otra podrían conmigo. No falta mucho para que se de cuenta de la chica que tiene ante sus ojos. Esos ojos... ¡Cuanto deseo que esos ojos me miren! ¡Cuanto deseo que él me mire!
